Tópicos.

Dado que no soy de los que reviso lo que he publicado, es posible que ya haya escrito sobre ésto. Supongo, dado que mis únicas experiencias en el extranjero fueron poco menos de una hora en Portugal en un viaje que hice con mis padres a Galicia y un fin de semana en Andorra, cada país tendrán sus tópicos. Pero como los que conozco son los españoles, pues de esos voy a hablar. Bueno, de todos, no. Más o menos, cada región o zona de España tiene los suyos pero en los últimos tiempos ha habido uno que ha cambiado. Y es el que se refiere a los catalanes. Siempre han tenido la fama de agarrados referente al dinero. Pero ahora el tópico es que quieren la separación de España. Ésto viene a raíz de un texto que puso un antiguo compañero de trabajo. Por su nombre, nadie pensaría que es catalán pero el icono que tiene es la bandera de Cataluña. Comentaba, no con cierto disgusto, la imagen que tiene, no sólo Cataluña sino los catalanes cuando salen fuera. Por supuesto, la gente con la que se cruzan o que les atienden en comercios y que tienen algún comentario despectivo hacia ellos o hacia su región, puede que no tengan la culpa de hacerlos sino que se remiten a lo que oyen o leen. Gracias a Dios, debido al trabajo que tengo, conozco a gente de muchas partes de España. Muchos de ellos son catalanes pero pesa más la amistad y el buen rollo que las diferencias, no políticas porque lo de la independencia no tiene nada que ver con ello, sino territoriales. Pues esa supuesta (y a veces no tan supuesta) animadversión hacia todo lo catalán les hace ver a los catalanes que igual es necesaria una mayor independencia de la que tienen ahora aunque no total. Ese sentimiento anti catalán se nada en que los que buscan la independencia hablan del maltrato continuo del gobierno español hacia Cataluña, de cuestiones geográficas, históricas, filológicas y culturales y del interés de la mayoría de la población. Unos para irse y otros para que se vayan. Realmente el mensaje es directo. En plan Pablo Iglesias. Eso hace que nadie se ponga a revisar si lo que se cuenta es verdad completa, a medias o mentira total. Y ahí está el problema. Todo el mundo oye y comenta lo que se dice lo que hace que hay gente que tenga una visión equivocada lo que hace que diga cosas equivocadas, lo que hace que quien oiga eso, tendrá ideas equivocadas. Y todo vuelve a empezar. Respeto a quien piensa que lo mejor es la independencia. No comparto su idea pero la respeto lo mismo que espero que hagan elos con la mía. Eso es democracia. No pedir un diálogo basado en que una parte decide que la otra debe aceptar su propuesta sin debatirla. Cataluña es parte de España. Cataluña es España.