15 octubre 2023

Los niños de Dios no están en venta.

    Siempre empiezo escribiendo que puede que ya haya escrito algo sobre el tema en cuestión pero que de este, no.

    Ayer domingo fui con mi novia al cine y vimos una película llamada "Sound of freedom" o "Sonidos de libertad". Por defecto el título sale en inglés pero en alguna parte aparece en español.

    La película trata sobre el mercado de niños y como se las apañan los pederastas. Da asco. Aunque tiene que haber de todo en el mundo (la comparación), da asco. A mí.

    El título del artículo es una de las frases que el protagonista dice al final a uno de los mercaderes de niños.
Él es policiía, agente del FBI pero que no consigue permiso para continuar una investigación sobre tráfico de menores todo lo que quisiera.

    Pero poco a poco va consiguiendo devolver a esas niños con sus padres. La verdad es que todo es poner interés. Durante la película, basada en un hecho real, se ve cómo actúa cada policía en función de la zona en la que se encuentre. Por desgracia hay muchas zonas ahora que están controladas por bandas, bandas, sicarios, etc. donde nadie entra salvo ellos o sus enemigos para luchar. Ese miedo hace que mucho delincuente ande suelto y a sus anchas. 

    Todo es así. Alguien engaña a alguien para llevárselo y hacer que otros se aprovechen. No sé como será en otros sitios pero el gancho de la banda es una mujer, una antigua Miss lo que hace que sea algo de lo que no se habla. Es una mujer. En ese punto se basan muchos porque a un niño es más fácil engañarlo si quien contacta es una mujer con buen trato y de físico llamativo. Se comen al niño y al padre que también es fácil cuando le explica el plan.
    
    Todo es fácil. Demasiado. Incluso poner en marcha la búsqueda es fácil. Lo difícil es dar el primer paso hacia lo desconocido.

    Bueno, os la recomiendo. Igual os parece fuerte y/o salís con mal cuerpo pero merece la pena.
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