Piropo.

A raíz de una foto con texto de Cristina Almeida, de esas que circulan por la red, se abrió un debate, medio en serio y medio en broma, acerca de los piropos. Puede que el texto fuera cierto o no pero fue lo suficientemente expresivo como para que se iniciara la charla. ¿Porqué le puedo decir a una pintura lo bonita que es y se me etiqueta como entendido en arte pero si se lo digo a una mujer, soy un machista y la degrado, la humillo y la desprecio?
Desde siempre, por piropo de entiende halago. Pero como todo en esta vida, la cosa depende de como se diga. El tópico del piropo es algo que un hombre le dice a una mujer. Lo ideal es que la mujer se sienta halagada. Esa es la idea del piropo. Quien lo haga con otro fin, no piropea. Ese sí que degrada. Pero no a ella sino a él mismo. Los ojos suelen ser objeto de piropos. "Tus ojos eclipsan el sol cuando se abren", "Si tus ojos subieran al cielo, las estrellas se irían", "No importa que no haya luna porque tus ojos iluminan la noche". La voz también es algo que es piropeado comparándola con música agradable al oído. ¿Qué haya gente a la que le moleste los piropos? Pues si. Y no es algo raro. Cada uno tenemos las cosas que nos gustan y las que no. Pero porque algo no nos guste, no se debe pedir que se erradique. De la misma manera que si algo nos gusta, no debemos dar por hecho que a todo el mundo le tiene que gustar, sin entender que pueda no gustar.
El piropo, tal y como ha sido tradicionalmente, es una alabanza a la belleza. Y tan bella es una pintura, una escultura, una ciudad o una mujer. Porque, como dije al principio, el tópico, ese que tanto nos gusta usar, sobre todo cuando uno se quiere hacer el gracioso, pasarse de listo o disimular que no sabe de loque se habla, indica que es una expresión hacia una mujer. Pero esas mujeres a las que no les gustan los piropos y cargan (sí, cargan) contra los que los dicen, callan cuando el piropo sale de la boca (que no de los labios) de una mujer. Callan y, hasta niegan. Las mujeres no hacen nada malo. Opinión respetable también. Pero nunca he oído salir de la boca de una mujer un piropo hacia un hombre igual que los que salen de los labios de éstos hacia aquellas. Que no quiere decir que sus bocas no suelten groserías. Pero eso no son piropos.